Bandle Tale: A League of Legends Story – Una reseña de un juego lleno de magia Yordle

Los Yordles; seres pequeños curiosos, peludos y llenos de magia, y su hermosa región de Bandle, se encuentran sumidos en el caos y la confusión. Después de que durante un festival, en el que se usó una madeja mágica de dudosa procedencia, los portales mágicos que conectan a las distintas regiones son desactivados, dejando incomunicados a los Yordles; otros fueron lanzados a distintas zonas sin forma de regresar, y para peor de males, la magia Yordle está en decaimiento. Es momento de que un valiente Yordle, de la región de los tejedores, se equipe con sus mejores herramientas, y salve a Bandle del caos total. ¿Estás listo para ser ese pequeño héroe en Bandle Tale: A League of Legends Story?

La historia y mecánicas de Bandle Tale: A League of Legends Story

En “Bandle Tale: A League of Legends Story“, asumimos el papel de un Yordle; una raza de seres pequeños, peludos, llenos de curiosidad, asombro y sentido de la aventura, el cual pertenece a la tribu de los tejedores, Yordles capaces de utilizar sus herramientas y madejas de lana para confeccionar artículos mágicos que permiten realizar tareas complejas en el día a día, y estamos bajo la tutoría de Gramps, un viejo tejedor que nos ha estado entrenando por 101 años en el arte de tejer. Un día, nuestro Yordle se entera que se va a realizar un gran festival en la isla central, y que Yordles de todas las regiones van a asistir, entre ellos Ozzy, un Yordle tejedor que ha dejado que la fama se le suba a la cabeza. Gramps no tiene en buenos términos a Ozzy, y nos prohíbe cualquier tipo de interacción con él. La cual hacemos caso omiso gracias a nuestra amiga Clover, quien nos incentiva a ir al festival en secreto.

Durante la fiesta le ayudamos a Ozzy a organizarla y finalmente a colocar una madeja mágica especial para dar inicio a las celebraciones. Pero en el momento que la depositamos, ocurre un gran estruendo y los portales mágicos son desconectados abruptamente. Regiones enteras (islas que flotan en el cielo) son separados, sin manera de comunicarse, excepto por medios físicos, lo cual representa un gran riesgo para los pequeños Yordles, y además varios de los que atendieron el festival, fueron lanzados a estas regiones, sin manera de comunicarse, como nuestra amiga Clover y Ozzy. Campeones Yordles de League of Legends como Tristana y Corki evalúan la situación y encomiendan a nuestro protagonista con la tarea de solucionar esta catástrofe, haciendo uso de nuestras habilidades mágicas con el tejido. Y así es como inicia nuestra aventura.

Mecanicamente, “Bandle Tale: A League of Legends Story” es un juego híbrido de varios géneros. Contiene elementos de RPG como un sistema de experiencia y subida de nivel para desbloquear nuevas habilidades; también tiene elementos de Sim de granja en donde recolectaremos recursos y los procesaremos para manufacturar nuevos artículos. De esta manera, la idea del juego es ir completando misiones, las cuales nos darán experiencia para desbloquear nuevos artículos que podemos crear para solucionar otras misiones. A medida que vayamos completando actividades como confeccionar una cuerda, preparar un plato de comida, etc., obtendremos puntos de experiencia, los cuales podremos redimir como puntos de habilidad cuando vamos a dormir en nuestra base. Estos puntos de habilidad son los que podremos usar en nuestro árbol de habilidades para desbloquear nuevas recetas y edificaciones que nos permitan avanzar en la historia. Cada nueva región nos representará una nueva rama en nuestro árbol de habilidades, con su propio set de requerimientos para completar las misiones. Para poder viajar a una región, tendremos que hacer un festival, en el cual invitaremos a los distintos Yordles de esa región para divertirse, y cambio, le presten su magia a una madeja mágica, la cual es capaz de reactivar los portales, reconectar a la región de Bandle y salvar a todos los Yordles.

El apartado visual y sonoro de Bandle Tale: A League of Legends Story

En cuanto al apartado visual, “Bandle Tale: A League of Legends Story” nos presenta un estilo pixel art super estilizado, con colores vibrantes y una hermosa atención al detalle. Cada región se siente única y especial, con pequeñas animaciones que ayudan a darle vida. Todos los personajes están muy bien detallados y animados, con animaciones específicas para distintas acciones y realizadas muy bien en pixel art. Gracias a esto, el juego corre con una excelente estabilidad y no requiere gran uso de máquina. En cuanto al sonido tenemos un gran problema; no sabemos si es por la calidad de la exportación o la importación de los archivos de audio, pero tanto los efectos de sonido como la música se sienten comprimidos, con perdida de calidad notorio durante todo el juego (como en juegos de los años 90), y esto destruye cualquier tipo de inmersión o maravilla durante las sesiones de juego.

El gran problema de Bandle Tale: A League of Legends Story

Dejando a un lado el problema del audio, “Bandle Tale: A League of Legends Story” tiene un problema muy grande, el cual no se mencionó en la sección de mecánicas porque creemos meritorio dedicarle su sección propia, y es que el juego tiene una fuerte crisis de identidad. Al intentar combinar elementos de muchos géneros de juegos, crea una masa sin forma ni identidad; no sabe si quiere ser un juego de aventuras, un RPG o un simulador de granja. Juegos como Harvest Moon o Stardew Valley han demostrado que los simuladores de granja son atractivos para el público, enfatizando en las mecánicas principales y dejando que el juego fluya. Rune Factory o Fantasy Life muestran que combinar simuladores de granja con acción o RPG son divertidos, permitiendo tomar las mejores cualidades de ambos géneros y creando una experiencia única y divertida. Pero “Bandle Tale: A League of Legends Story” no tiene nada de esto; frenar el progreso del jugador con un sistema de misiones obligatorias destruye cualquier incentivo de crear una granja o base de operaciones, cada nueva región simplemente se convierte en una serie de requerimientos que se deben cumplir para avanzar y no permite que el jugador se inmersa en la experiencia.

Los recursos que se pueden recoger son limitados en las zonas donde aparecen y tienen un tiempo de reaparición, obligando al jugador a esperar tiempos aleatorios o ir a dormir para que avance el día y poder recogerlos nuevamente. Más adelante se pueden crear nodos de recolección en la base, pero es tan adelante en el juego que desincentiva a cualquier jugador. Los tutoriales y guías están tan mal diseñados, que obligan al jugador a estar constantemente abriendo el menú de misiones para recordar que tiene que hacer, como tiene que hacerlo, a donde tiene que ir. Información vital que se necesita para construir un artefacto o un establecimiento aparece dos o tres mensajes más adelante, cuando ya el jugador tuvo que descubrirlo por cuenta propia. Además que al realizar acciones de creación o recolección obtenemos experiencia, y esta se va acumulando hasta cierto limite; si seguimos obteniendo experiencia y estamos en el limite, esta se pierde; lo cual obliga a estar yendo constantemente a la base a dormir, y poder convertir esta experiencia en puntos de habilidad. Y la cereza en el pastel, cada acción repetida que hagamos, nos otorga menos experiencia cada vez, hasta finalmente otorgar nada de experiencia; si no se tiene cuidado y se tiene presente esta mecánica, podemos bloquear por completo el juego, ya que sin experiencia no podemos obtener puntos de habilidad, y sin puntos de habilidad no podemos desbloquear la receta que necesitamos para avanzar.

Veredicto Final

“Bandle Tale: A League of Legends Story” tenía un gran potencial, por lo que se podía ver en los trailers, uno podía pensar que iba a ser un acogedor juego de simulación de granja, hablando y compartiendo con los campeones Yordles de League of Legends, y creando una satisfactoria base en la que podemos invertir horas y horas. Pero lamentablemente no es asi; problemas de progresión, tutoriales incompletos, un bucle de juego agotador que no es capaz de engancharte en los primeros diez minutos y que te exige más y más sin dar mucho a cambio, archivos de audio mal comprimidos que destruyen cualquier intento artístico por crear ambientación, crisis de identidad de las mecánicas de juego, y más. Y todo esto se siente peor ya que “Bandle Tale: A League of Legends Story” es el último título que produjo la iniciativa de Riot Forge, en la que Riot Games buscaba que desarrolladores independientes pudieran crear juegos usando el mundo de League of Legends. Lamentablemente tenemos que calificar este título con un 3; la idea inicial era atractiva y visualmente es hermoso, pero la pobre implementación de mecánicas, terrible calidad del sonido y falta de identidad, terminan de hundir este juego.