Solforge Fusion – Reseña de un juego que se quemó en el horno

En un mundo de magia y tecnología, de criaturas mitológicas y dinosaurios salvajes, un grupo de héroes traerá orden al caos y liderará a estas fuerzas para lograr su objetivo. Tomarás el papel de uno de estos héroes y crearás una baraja que funcione acorde a las fuerzas de su atributo. Ha llegado el momento de poner tus habilidades a prueba en Solforge Fusion.

Creando barajas en Solforge Fusion

Solforge es un juego de cartas creado por Richard Garfield (Magic the Gathering) y Brian Kibler, en el que la mecánica principal es la creación de barajas uniendo dos “tribus” diferentes; cada tribu cuenta con una serie de poderes que les permite tener ventajas únicas a la hora de luchar, y al combinar dos tribus, se pueden crear sinergias poderosas. Solforge Fusion es la versión digital de este juego de cartas con una opción de juego roguelite adicional, en el que podremos experimentar el juego de cartas en nuestro computador.

En Solforge cada jugador cuenta 50 puntos de vida y el objetivo es reducir los del oponente a cero, cada jugador tiene cinco columnas en su campo, y estas columnas están divididas en dos filas, cada una representando Ataque y Defensa, al inicio de cada ronda, un jugador obtendrá la Forja, un indicador que muestra que ese jugador inicia la jugada y que está a la ofensiva. Cada jugador solo puede jugar una carta por turno, a menos que por efecto de la misma carta u otras cartas, le permitan jugar múltiples de su mano. Luego de que el jugador con la Forja juega sus cartas, pasa el turno al oponente, este jugará sus cartas, le devuelve el turno al jugador inicial y finalmente al oponente; donde llegarán a la fase de combate. El jugador a la ofensiva solo podrá jugar monstruos en la parte delantera de Ataque, y el jugador a la defensiva solo podrá jugar monstruos en la parte trasera de Defensa; a menos que por efectos especiales, las cartas puedan moverse de adelante hacia atrás y viceversa. En la fase de combate se resolverán las columnas empezando por la izquierda; se compararán los puntos de ataque del atacante y los puntos de vida del defensor, si son superiores los del primero el segundo morirá, y si no, entonces permanecerá en el campo con el daño acumulado; si no hay ningún monstruo en la columna opuesta al atacante, este le hará daño al jugador oponente. Cuando se resuelvan todas las columnas, acabará la ronda y la Forja pasara al oponente, y de esta manera hasta que alguno de los dos jugadores quede sin puntos de vida y se declare un ganador.

Cada jugador inicia con una mano de cinco cartas y cuando finaliza una ronda, deberá descartar las cartas que no usó y robar cinco nuevas. Cada tres rondas se finaliza un ciclo, y se barajan todas las cartas descartadas y la baraja. A medida que se usan cartas, estas subirán de nivel empezando por uno y llegando a nivel tres, con cada nivel mejorando las estadísticas y efectos de la carta. Los monstruos, equipamientos y hechizos no tienen costo de maná o algún recurso para usar. Y partir del ciclo dos, cada jugador tendrá acceso a un poder de uso único correspondiente al héroe principal que eligió para crear su baraja. Algunos poderes permiten jugar cartas extras, ponerle escudos a los monstruos, etc.

En cuanto al videojuego, este se encuentra en fase de construcción con actualizaciones semirregulares que arreglan problemas de a pocos. Nos encontramos con varios bugs, uno muy recurrente que era al jugar una carta de manera rápida desde la mano, la carta quedaba suspendida en el aire y había que reiniciar la partida para que se arreglara. La interfaz es bastante precaria y los menús, sobre todo con las reglas, terminología y el registro de jugadas tienen serios problemas de lectura. El arte de las cartas está bien realizado, ya que este juego originalmente es físico, pero las ilustraciones de los héroes parecen hechas por otra persona completamente. Cuenta con un modo de juego online contra otras personas, juegos contra la computadora y el modo roguelite que es el punto de venta de esta versión. Este modo de juego es lo más básico que se puede pensar de ello, seleccionando un poder que le dará un efecto especial a la baraja y eligiendo un oponente con un poder especial, de esta manera, hasta llegar a un jefe final.

Sin cartas en la baraja

Solforge Fusion es lastimosamente un juego que le hace más mal que bien al juego de cartas físico. Con mecánicas e interfaces que hacen dificil el disfrutar el juego, unas seria falta de pulido como animaciones de combate, invocación, efectos y demás (en comparación con otros videojuegos de cartas coleccionables como Magic the Gathering Arena, Hearthstone, Yu-Gi-Oh! Duel Links o Legends of Runeterra). Si esta fuera la primera aproximación a este juego por parte de un jugador, me mantendría completamente alejado de la versión física; tal vez esta sea más divertida y mejor implementada, pero Solforge Fusion, el videojuego, es una forja que es mejor mantenerla apagada.