En este mundo donde los humanos hemos perdido nuestro trono en la cúspide de la pirámide alimenticia frente a seres ferales conocidos como Ghouls, seres con apariencia humana que cuentan con un órgano especial que les permite manifestar apéndices y poderes especiales, pero con el costo que deben alimentarse de carne humana para sobrevivir. En esta realidad tan retorcida, sucumbiremos como humanos frente a estos nuevos depredadores o les haremos frente armados con tecnología de punta o usando sus propias armas en su contra. O tal vez la seducción de la carne humana hará que nos convirtamos en Ghouls y decidamos instaurar un nuevo orden mundial. El mundo de Tokyo Ghoul es retorcido y en el centro estamos nosotros para decidir su destino.
La Historia
Tokyo Ghoul: Re [Call to Exist] (TGR) nos cuenta la historia de Ken Kaneki, un chico adolescente tranquilo e inocente, el cual luego de tener una cita con Rize Kamishiro, una dulce joven, con quien comparte interés en los libros de una autora particular, es asaltado por su cita, ya que resulta que ella es un Ghoul, un ser con apariencia humana, el cual tiene fuerza sobrehumana y les permite manifestar apéndices para atacar o defenderse; el costo de esto es que los Ghoul únicamente pueden consumir carne humana para vivir. Kaneki queda al borde la muerte, cuando un contenedor cae sobre Rize, matándola en el acto. Los paramédicos encuentran a Kaneki y el cuerpo magullado de Rize, y deciden realizar un trasplante de órganos rápidamente en Kaneki para salvarlo. Dicho acto deja dentro de Kaneki el mismo órgano que le da sus poderes y fuerza a los Ghouls, convirtiéndolo en un hibrido. Con el tiempo, Kaneki confronta su situación y encuentra el apoyo necesario para poder afrontar su realidad: consigue un trabajo como mesero en la cafetería Anteiku, un sitio donde Ghouls que no quieren consumir carne humana, consiguen alimento con un substituto. A partir de este punto, Kaneki debe empezar a confrontar su nueva realidad, los pros y contras que esto implica, y como el mundo subterráneo de los Ghouls y los Doves, una organización que se especializa en la caza, aprisionamiento y estudio de los Ghouls, y no perder su humanidad en el proceso.
El juego inicia en un punto crucial en la historia de la serie, y continua con una progresión de capítulos con momentos claves. El modo historia está centrado en la historia de Kaneki, y a medida que vamos progresando en los capítulos, se irán desbloqueando nuevos puntos de vista, desde la organización Doves y sus miembros expertos, los Quinques.
El Apartado Visual y su Rendimiento
Para esta reseña, utilizamos un computador de escritorio con las siguientes especificaciones:
– Procesador AMD Ryzen 5 2600
– Tarjeta de Video MSI 1050 GTX TI Gaming X de 4 Gb
– Board MSI A320M Bazooka
– RAM DDR4 8 Gb 2400 GEIL EVO
Gracias a estas especificaciones el juego corre con gráficos altos en todo momento, sin caída de frames en un ningún momento. Lastimosamente, hasta aquí pueden llegar nuestros halagos, ya que se siente que el juego podía darnos aún más en el apartado visual. Ya que el juego fue desarrollado también para la consola PlayStation 4, este se siente más como un port de la consola y no con la idea de ser jugado en PC. E incluso, siendo más críticos, el nivel gráfico está muy por debajo de lo que la PS4 puede ofrecer. En resumen, no exige un equipo muy poderoso para ser jugado.
El Apartado Sonoro
En cuanto al ambiente sonoro y musical, el juego nos presenta con rock intenso, lleno de acción en sus acordes, dándonos energía para concentrarnos en el combate. En los puntos donde la situación amerita calma y procesamiento de información, la tonalidad cambia a un punto de sobriedad y seriedad. Los efectos de sonidos proveen impacto a los ataques recibidos y ejecutados. El juego cuenta con diálogos en japonés, los cuales narran las escenas previas al juego y durante el mismo.
La Jugabilidad
Finalmente, llegamos al punto central de todo videojuego, sus mecánicas y que tan buenas son estas. En el caso de TGR, tenemos mucho por analizar. El juego es un hibrido entre hack-and-slash (atacas oleadas de enemigos) y un soulslike (juegos inspiradas en las mecánicas de la serie Dark Souls, notorias por su dificultad y la administración de recursos limitados); presentándonos con un sistema en el que todas las acciones que realicemos (ataques, evasiones, combos, etc.) implicarán un coste de energía; cuando consumamos toda nuestra barra de energía no podremos continuar hasta que no recuperemos el porcentaje necesario de energía para proseguir.
Nuestras acciones son: Ataque Simple (que puede hacer combo), Ataque Pesado (el cual puede cargarse para realizar más daño), Ataque Aéreo (útil para romper defensas), Esquivar, Ataque a Distancia (en el caso de los humanos, nos permite usar granadas) y Ataque Especial (el cual se carga con nuestros ataques, y libera una poderosa fuerza devastadora). Estas mecánicas nos permiten limpiar las oleadas de enemigos que aparecerán en nuestro camino y balancear nuestros recursos para salir victoriosos. Lastimosamente, uno de los grandes problemas por los que sufre el juego es la cámara; esta es en tercera persona sobre el hombro a distancia, y cuando necesitemos apuntar para atacar a distancia, se acercará y saldrá una retícula para atacar; la problemática surge porque la cámara en muchos casos actúa de manera independiente a donde uno quiere que apunte, la gran mayoría de las veces luego de hacer un Ataque Especial, la cámara quedara apuntando a un punto muerto en donde hasta que no la movamos, somos blanco fácil para los ataques.
El sistema de Lock-On sufre mucho, ya que normalmente en un juego como Dark Souls, al enfrentarnos a varios enemigos y enfoquemos la cámara a uno en particular, luego de derrotarlo, la cámara enfocará automáticamente al enemigo más cercano, preservando la fluidez del combate; en el caso de TGR, ocurre lo contrario. Luego de derrotar a un enemigo, la cámara continuará apuntando al sitio donde fue derrotado el enemigo y tendremos que accionar nuevamente el botón de Lock-On para saber a qué nos enfrentamos; esto se vuelve crecientemente más caótico en los casos donde nos enfrentamos a grandes oleadas de enemigos.
Lo cual nos lleva al segundo punto: La inteligencia artificial de los enemigos. O la falta de. Ya que nos encontraremos con hordas de enemigos con simples ordenes de atacar lo que tengan enfrente, carne de cañón en términos simples. Lo cual convierte el combate del juego en algo completamente repetitivo y frustrante. Son oleadas de enemigos que caen con uno o dos ataques simples, algunos que de vez en cuando se defenderán, y un mini jefe, el cual intrínsecamente, cuenta con las mismas mecánicas de ataque y de defensa de nosotros. Repetir ad infinitum y con eso concluiremos los capítulos de la historia, y los otros modos que ofrece el juego.
Finalmente, el juego cuenta con varios modos de juego; Historia, el cual contará la historia de Ken Kaneki a partir del punto del asalto de Doves a la guarida del Aogiri Tree, y al completar este, se desbloquerán los otros modos de juego, así como las historias alternativas en las que asumiremos el rol de Investigadores o Quinques en los mismos capítulos de la historia; Subsistencia, en donde podremos crear un personaje único que puede ser Ghoul, Investigador o Quinque, y enfrentarnos modos de combate basados en los capítulos con un equipo de otros 3 personajes (podemos jugar con un amigo en línea) o acceder al modo en línea, donde pelearemos con los personajes de otros jugadores en línea. También iremos recolectando materiales los cuales nos ayudaran a mejorar nuestro personaje y de acuerdo a como resolvamos los encuentros y combates, seremos recompensados con un sistema de puntuación que toma en cuenta ataques, bajas y el tiempo usado para completar la misión.
El Veredicto Final
Lastimosamente, a menos de que seas un fan ferviente de la serie, Tokyo Ghoul: RE [Call to Exist] no es un juego para todo el mundo. Si se quiere saber el contexto de lo que ocurre en el modo campaña, es necesario saber sobre la serie, ya sea leyendo el manga o viendo el anime. El combate se siente arcaico, comparado con la última década de evolución que ha tenido el género hack-and-slash, dejando mucho que desear. Los modos de historia alternativa, y la posibilidad de crear nuestro personaje, le dan un toque salvador a un título que tranquilamente podíamos dejar a un lado. Por ello, le concedemos el Botón B. Un juego con mucho material del cual aprovechar, pero el cual lastimosamente sufre por sus mecánicas.
Reseña escrita por: Jorge Aguilera (El Botón Y) Reseña realizada sobre la versión de PC (Steam), con una copia digital de Tokyo Ghoul: Re [Call to Exist] brindada por Bandai Namco. Gracias por la colaboración.
